Cuando planeamos un viaje, tenemos en mente disfrutar de muchas formas distintas. Trazamos itinerarios, decidimos dónde y cómo queremos alojarnos, tomamos una decisión sobre el tipo de souvenirs que queremos traernos de vuelta, etc. Por supuesto, otro de nuestros objetivos prioritarios es deleitarnos con la gastronomía local o regional, una manera de conocer a fondo nuestro destino.
En Menorca, isla de contrastes gracias a sus calas de arena blanca y sus zonas boscosas, que rebosan vida durante todo el año, lo realmente difícil de planear una degustación a fondo de la gastronomía es conseguir probarlo todo. Porque Menorca es el lugar de la sobrasada y el queso, de la caldereta de langosta y, por supuesto, de la ensaimada de Menorca.
Si no sabes de todo lo que puedes disfrutar en Menorca tanto en gastronomía como en lo que a souvenirs respecta, solo tienes que visitar nuestro post sobre qué comprar en Menorca, en el que te indicamos los mejores recuerdos y souvenirs que te puedes llevar de esta isla maravillosa.
A estas alturas todos nosotros conocemos la ensaimada de Menorca, ya sea porque hemos podido consumirla en nuestro pueblo o en nuestra ciudad de origen, o porque algún familiar o amigo menorquín nos ha traído una. Pero disfrutarla en Menorca es mucho mejor. Veamos por qué:
Por la pureza de su sabor
La ensaimada puede producirse de manera industrial, pero es mucho más auténtica cuando la elaboran pasteleros artesanos de la isla. Con la ensaimada de Menorca más tradicional nuestro paladar disfrutará con esta masa dulce y suave rellena con cabello de ángel o con el relleno que elijamos ponerle.
Para intimar con la isla
Antes lo hemos mencionado de pasada, pero, en general, degustar las exquisiteces del lugar al que decidimos viajar nos ayuda a conocerlo mejor y a sumergirnos más en nuestra aventura. Merendar una ensaimada de Menorca mientras pasamos la tarde paseando por las calles de Mahón o escuchando el sonido del mar puede ser algo único.
Para llevarnos un recuerdo
Por primera vez, nosotros podemos ser esos amigos, esos novios y novias o esos familiares que lleven a nuestros seres queridos un grato recuerdo de la isla balear. En este caso, un recuerdo en forma de ensaimada de Menorca. Así, experimentarán en parte lo que nosotros mismos hemos podido vivir descubriendo la isla.
No cabe duda de que la ensaimada menorquina sigue siendo, a día de hoy, uno de los manjares más valorados tanto por los visitantes del exterior como por los propios habitantes de Menorca. Para descubrir el motivo, lo mejor que podemos hacer es viajar hasta el epicentro de tan glorioso sabor. Cuando nuestras vacaciones terminen, ningún otro dulce sabrá igual.
